Maria

Las miradas a la Virgen

15. noviembre 2020 | Por | Categoria: Maria

Aquel gran Jefe militar y héroe de la Primera Guerra Mundial ─admirado por su pueblo vencido y respetado grandemente por el enemigo vencedor─, llegó a ser Presidente de Alemania. De religión protestante luterano, demostró ser sin embargo gran amante de la Virgen María. Tenía en su despacho una preciosa imagen de la celestial Señora, a la que dirigía miradas muy tiernas.
Más de una vez se le preguntó con extrañeza…



La Estrella de la Evangelización

8. noviembre 2020 | Por | Categoria: Maria

¡Hay que ver el gusto con que llamamos hoy a la Virgen “La estrella de la Evangelización!”… Porque el Evangelio, el gran anuncio de la Salvación, empezó por María. Porque la Iglesia comenzó su aventura misionera en Pentecostés con María en el centro de los Apóstoles. Porque María ha guiado siempre a los misioneros de Jesús para que lleven eficazmente Jesucristo a todos los hombres de todas partes y de todos los tiempos…



Con la “Llena de gracia”

1. noviembre 2020 | Por | Categoria: Maria

En el Año Santo de 1950 empezó a rumorearse en serio de que el Papa Pío XII iba a definir el dogma de la Asunción de María en cuerpo y alma al Cielo. Una muchacha preciosa, que acababa de cumplir los veinte años, se dijo:
– ¡Ésta es la mía!… Si es verdad que el Papa va a hacer eso, yo no lo voy a contemplar en la tierra, sino que quiero celebrarlo en el Cielo…



¡María, ven a mí!…

26. octubre 2020 | Por | Categoria: Maria

Es muy natural que escuchemos a la Virgen María, y oigamos esta palabra suya: -¡Ven aquí, hijo mío! ¡Hija mía, acércate!… Sería esto lo más natural, en labios de quien recibió de Jesús el encargo: -Ahí tienes a tu hijo, ahí está esa hija tuya… Pero, ¿y si hiciéramos al revés? ¿Si fuéramos nosotros los que le decimos a la Virgen: -¡Madre, ven aquí, que te espero!…
Pues, sería esto también lo más natural. Porque el mismo Jesús que le dijo a María “Ahí está tu hijo”, le dijo al discípulo “Ahí está tu madre”. Y, como dice el Evangelio, “el discípulo la tomó inmediatamente por suya” (Juan 19,26-27)