Oración

El zapatero y su Biblia

¿Sirve para algo la lectura asidua de la Biblia?... Es una pregunta que está de más. Y la respuesta adecuada ...

Narraciones Bíblicas

El “joven” Eleazar

Muchas veces se dice y se repite que la juventud no es patrimonio de los años sino de la frescura ...

Diversos

Preguntas y Consejos a Papa y Mama.

El Ministerio de Padres y Madres Orantes en sus doce años de existencia ( 1999-2015) ha podido ver que  la ...

Actividades

Hora Santa Internacional – Santa Fe Argentina

Celebra el Ministerio de Padres y Madres Orantes Hora Santa internacional desde la parroquia de Nuestra Señora de la Merced en Santa Fe, Argentina.

Agradecemos a todo el equipo en Santa Fe y al Padre Gabriel Lauria por su tiempo y apoyo al Ministerio PMO y su mensaje a los padres de familia.

Jesucristo

El Cristo de nuestra América

¿Podemos pensar en un Jesucristo propio de nuestra América Latina?… Es decir, ¿han de vivir nuestros pueblos el misterio de Cristo de un modo peculiar? ¿No tenemos nosotros unas maneras de ser que nos hacen mirar a Cristo según nuestra idiosincrasia, muy diferente de la de otras partes?
Nuestros Obispos lo reconocen en los Documentos de Puebla, y nos dan unas normas precisas para mirar, evangelizar y vivir a Jesucristo en nuestros pueblos…

Familia

El esposo y el padre, un rey

Al hablar de la mujer, como esposa y madre, la llamamos muchas veces con gran cariño: La reina del hogar. Decimos muy bien. En su casa, la mujer es una reina. Pero nos podemos preguntar: -¿Y por qué no llamamos al hombre el rey del hogar? Sabemos que lo es, pero la expresión cariñosa la hemos reservado para la mujer.

Aunque no en todos los pueblos pasa lo mismo. Por ejemplo, cuando vemos por la televisión o leemos en las revistas la celebración de una boda en los países orientales de Europa —Grecia, por poner un caso— nos llama la atención la corona que luce el esposo durante la ceremonia…

Gracia

La obra del Espíritu Santo

Son muchas las veces que hablamos del Espíritu Santo en nuestros mensajes. Y quizá lo debiéramos hacer más todavía.
Porque estamos en un renacer providencial de la devoción al Espíritu Santo. Son muchos los cristianos que hoy, impulsados por el mismo Espíritu, se confían a Él y ven renovadas sus vidas. Y mientras cantan y aplauden y oran, a ojos vistas se van transformando en imágenes cada vez más perfectas del Señor…